Cálida y de una simpatía que desborda. Maestra quesera y mamá, cuyos hijos y nietos son su motor e inspiración. Así es Bernardita Correa, quien desde 2015 ha sabido trabajar una propuesta en torno a la elaboración de quesos y lácteos de autor con procesos 100% artesanales. “La magia de la maduración se refleja tanto en nuestros quesos como en nuestras vidas”, apunta, reafirmando un viaje lleno de amor y dedicación con la quesería y la familia como principales baluartes. Tras este emotivo mensaje, junto a Berni te invitamos a conocer la receta de su Historia con Sabor y más del reciente lanzamiento de sus mantequillas saborizadas.
“Quesos Bernadette» viene de la referencia del nombre de su autora, en francés; de Bernardita a Bernadette. La Berni, como cariñosamente es conocida en el rubro gastronómico, es maestra quesera y justamente se inspiró en el arte del país galo para la producción de sus quesos y lácteos. Buscando también, posicionar a futuro su marca internacionalmente.
Cómo no, si a lo largo de su vasta trayectoria como artesana de los quesos, han sido varios los halagos del público nacional y extranjero hacia sus productos. Con esto en mente y a sabiendas del banquete con el que nos deleitaría, la recibimos en la cocina-estudio de Mango Merkén para ver y probar –en primera persona- los detalles de su Historia con Sabor.

UN MENÚ CAMPESTRE
Regalándonos una sonrisa que enternece mientras despliega todo un festival de quesos y su nueva línea de mantequillas, rememora su viaje alrededor de la cocina. “Partí muy jovencita, imagínate que voy a cumplir 60 años ya, toda una vida dedicada a la cocina”, reconoce, recalcando su gusto por dicha actividad.
Hija de un padre viñatero, su familia tenía un campo en Curicó; esbozando un primer acercamiento al matrimonio entre el vino y el queso. Y como en el campo la vida gira en torno a la comida, desde pequeña disfrutó de placeres al paladar como el clásico manjar casero y mermeladas; también palpando la tierra, revoloteando en la huerta para cosechar tomates y choclos, entre otras delicias. Incluso encaramándose arriba de los árboles, para obtener una preciada y jugosa manzana.
¿Y alguien hacía queso? – Preguntamos.
“La verdad es que no, en mi casa no”, dice, pero revelando una divertida anécdota en la casa del capataz del campo. Su pareja, hacía queso fresco. Y Berni, con ese espíritu goloso y curioso que la caracteriza, la iba a visitar para meter las manos directamente en la cuajada…

“Hacíamos quesillo con las manos. Era muy entretenido porque hacíamos queso fresco en latas de atún. Se le hacían hoyitos con un clavo y ahí se moldeaba y desmoldaba. Y se le ponía una gasa por la orilla para que siguiera con la forma del queso”, comenta con una alegría latente por aquel recuerdo.
CUAJANDO SU PROTAGONISMO EN LA COCINA
Si bien Bernardita estudió Trabajo Social en la Universidad Católica, un año y medio después de titularse atendió el incesante llamado de la cocina y comenzó a hacer postres. Tras el éxito de su propuesta, montó una banquetería junto a una amiga durante 10 años. En paralelo, realizó diversos cursos gastronómicos en Inacap y otras instituciones, además de apostar por lo autodidacta; ensayo y error, investigando y perfeccionando su currículum culinario.
A tal punto llegó su pasión por la cocina, que en 1997 –aún junto a su socia- abrieron una escuela de cocina. “Se nos ocurrió antes del boom. Fuimos precursoras en ese sentido”, aclara, orgullosa por los 3 años que tuvieron al mando de ese proyecto.
Después de ser mamá por cuarta vez y poniendo énfasis en la familia, se mantuvo al margen de la escena gastronómica hasta principios de la década del 2000, cuando se le presentó una gran oportunidad en Falabella; empresa que la buscó para formar su área de productos gourmet.
Una tendencia que ya venía al alza en nuestro país, y que en Bernardita encontró el protagonismo necesario para darle un mayor impulso. A raíz de esta experiencia, los viajes al extranjero para encontrar las mejores referencias para la tienda, se convirtieron en una oportunidad única para probar las maravillas del primer mundo.

Como buena amante de los quesos, pudo probar una infinidad de variedades que aún no llegaban a nuestro país. Por ejemplo, el gorgonzola, uno de sus favoritos. En esos momentos de placer, esta futura maestra quesera concluyó lo interesante que sería proponer una quesería gourmet made in Chile.
ENSAYO Y ERROR A TRAVÉS DE LOS QUESOS
Tras otras experiencias laborales en una importadora de productos gourmet, en Emporio La Rosa y en el ex Ópera Catedral, su carrera comenzó a girar definitivamente hacia el mundo de los quesos. Entre risas y dándonos a probar su espectacular queso de cabra “Cenizas”, recuerda sus primeros intentos en torno a la elaboración de quesos: “Intenté con leche de caja y no me resultó”.
La respuesta a este error llegaría en 2013, realizando un curso de quesos en la ex Casa de Oficios. En resumen, la leche de caja es ultra pasteurizada a 170 grados y no permite que las bacterias buenas permanezcan intactas para hacer queso. Por lo mismo, los quesos se fabrican con leche cruda recién ordeñada de la vaca, pasteurizada a 63 grados para eliminar las bacterias malas y queden sólo las buenas.
Aquel curso fue un antes y un después para Bernardita, quien gracias a toda su experiencia y conocimiento en la cocina y mundo gourmet, repitió una y otra vez distintas recetas; teniendo a sus amigos y familia como un exigente jurado. Las preparaciones que empezó a hacer y a comercializar desde 2015, que ganaron aplausos y que la guiaron por un buen camino, fueron el ya mencionado gorgonzola, el camembert y los de cabra. Es más, su actual y deliciosa pirámide de queso de cabra con ceniza encontró sus orígenes en esas pruebas.

BERNARDITA CORREA, MAESTRA QUESERA
En 2017, su expertise como maestra quesera la llevó a compartir todos sus conocimientos en unos cursos de quesos en Brann Academy y en Kitchen Club. Incluso talleres personalizados, donde se acercó gente motivada por aprender de una variedad en específico, como lo fue con el parmesano.
Desde aquella faceta educativa y en esta conversación con Mango Merkén, Bernardita vuelve a sus orígenes remarcando a su familia como motor e inspiración. Madre de 4 hijos, todos pudieron ver y apoyaron el desarrollo de su madre como una verdadera artesana de los quesos. Desde pequeños compartieron la cocina junto a ella y aprendieron de su mano. “Fueron tus primeros alumnos”, comentamos provocando una sonrisa en nuestra querida Berni:
“Desde que tenían un año, un año y medio, yo los sentaba en el mesón de la cocina y me ayudaban a echar la harina, a picar ingredientes. Fueron mis primeros alumnos de todas maneras”.

NUEVOS PRODUCTOS PARA SU MIX DE QUESOS Y LÁCTEOS
El éxito de Bernadette en base a sus quesos y lácteos de autor fue progresivo, madurando desde tiendas gourmet, boutique, restaurantes, hasta su anhelada entrada al retail a través de supermercados. No obstante, detalla algunos de los difíciles procesos con los que debió lidiar; hacerse cargo de toda la producción, ir a buscar ella misma la leche (bidones de leche de 10 litros que a veces sumaban 40 litros), transportarla en su auto, comprar los insumos… Y a todo eso, agregarle la faceta de vendedora y no dejar a la familia de lado.
En 2020, agradecidamente la pandemia la tomó desde un lugar con aires de consolidación, implementando un e-commerce que funcionó a la perfección. Y gracias al aumento de la demanda, se generaron nuevas instancias creativas en el equipo que formó con los años, estrenando productos como la provoleta (100% artesanal, estirada a mano como se hace en Italia) y la ricota.
MANTEQUILLAS SABORIZADAS BERNADETTE
Volviendo al presente y a esta deliciosa visita a la cocina de Mango Merkén, esta maestra quesera es enfática en señalar que -por ahora- su propuesta no se dirige hacia una tienda física, pero sí a mejorar con creces lo conseguido. En ese proceso, su nueva línea de mantequillas promete comerse el mercado con todo su sabor y textura…
“Somos los primeros en tener mantequillas saborizadas en supermercados. Ha sido todo un éxito”, señala feliz. Ajo – sal de mar, a las finas hierbas, miel y tomillo y más. Descubre aquí todas sus variedades.

Tuvimos el privilegio de probarlas en una baguette rellena con mantequillas a las finas hierbas (romero, eneldo, tomillo y salvia). Y en un pan de masa madre, que se transformó en una auténtica obra de arte: una vela a base de mantequilla de ajo, y de miel y tomillo, que se iba fundiendo mientras la llama bajaba y untábamos el pancito con la mantequilla. ¡Qué delicia!
Finalizando la jornada, los quesos también fueron protagonistas: Bernardita nos deleitó con unos rollitos de masa philo horneados, rellenos de queso de cabra y servidos con miel, semillas de sésamo y un toque frutal. ¡Una explosión de sabores y texturas en boca! Y por supuesto, como toda buena conversación, acompañamos esta Historia con Sabor con una tabla de quesos de cabra “Cenizas” y de cabra prensado.

¡Esta nueva Historia con Sabor de Mango Merkén es un adelanto de cómo se viene el año! ¡Definitivamente será todo un banquete! Compártela con tus amig@s y prueben lo mejor de los productos de Bernadette.
Instagram: @quesosbernadette
Web, pedidos y dónde comprar: bernadette.cl
WhatsApp: +56958166368
Los quesos y lácteos son tentempiés perfectos: satisfacen el paladar con su cremosidad y variedad de sabores, mientras aportan nutrientes esenciales como calcio y proteínas para un bocado delicioso y nutritivo.
Sin duda, desde Mango Merkén nos declaramos fanáticos de los quesos y lácteos. Y más aún, de los productos de Quesos Bernadette, donde puedes comprobar con su calidad, cada uno de los atributos anteriormente descritos.